Mírate al espejo
Cuando pasamos muchas veces frente al centro cultural de Huaraz o frente a una demostración de arte ancestral como son las danzas o teatros andinos, lo vemos como algo ajeno a nosotros y lo único que hacemos es mirar de soslayo y seguir de frente, sin ponernos aunque sea un instante a meditar que esa puesta en escena es una representación de lo que nuestros antepasados hicieron y vivieron.
Es muy penoso ver y sentir que le hacemos malas caras a nuestra cultura, a nuestras raíces, a nosotros mismos, porque quieran o no aceptarlo somos reflejo de danzas, teatro, cantos y tantas otras actividades que manifiestas todo el bagaje cultural que corre por nuestras venas al cual hacemos caso omiso.
Pero si nos ponemos a cavilar en como rescatar nuestra identidad como pueblo primero veamos como hacemos para rescatar a nuestros jóvenes que se creen lejanos y ajenos a estas manifestaciones.
Una de nuestras metas como ciudadanos de Huaraz debe ser que nuestra juventud tome conciencia y revaloren lo suyo lo acepten y formen parte de estas manifestaciones culturales. Porque para muestra un botón y mas claro botón que las polleras multicolores de nuestras compañeras de las zonas rurales a las que muchos ciudadanos ignorantes les muestran su desprecio o hacen malas caras sólo por el hecho de aceptarse y vestir sus atuendos tradicionales sin tratar de imitar a nadie, esta actitud es realmente reprobable.
¿Qué estamos haciendo por revalorar nuestras costumbres y tradiciones? La mayoría de gente no hace nada lo deja pasar y sólo ve que cada vez recordamos menos de nuestras tradiciones y copiamos estilos del extranjero en ropa, bailes y música.
La forma de afirmar la identidad cultural es el conocimiento fundamentalmente, y creo que no nos conocemos lo suficiente. Conozcamos más a nuestro pueblo y sus manifestaciones.
Es impresionante lo poco que sabemos los unos de los otros. Lo poco que se conoce, poco o nada sabemos de todo el arte que existe en nuestro pueblo salvo muy raras personas que están inmersas en el hermoso mundo de la cultura, y poco sabemos de la música y manifestaciones de ese tipo.
Hay una labor muy importante, que nos resulten muy familiares las manifestaciones culturales de nuestro pueblo. Es una tarea de imaginación, una tarea de recursos, una tarea poco rentable, entonces no es fácil, pero sí es importante. Es hora de hacer caso primero a todo el arte que tenemos y luego veamos hacia fuera.
Es muy penoso ver y sentir que le hacemos malas caras a nuestra cultura, a nuestras raíces, a nosotros mismos, porque quieran o no aceptarlo somos reflejo de danzas, teatro, cantos y tantas otras actividades que manifiestas todo el bagaje cultural que corre por nuestras venas al cual hacemos caso omiso.
Pero si nos ponemos a cavilar en como rescatar nuestra identidad como pueblo primero veamos como hacemos para rescatar a nuestros jóvenes que se creen lejanos y ajenos a estas manifestaciones.
Una de nuestras metas como ciudadanos de Huaraz debe ser que nuestra juventud tome conciencia y revaloren lo suyo lo acepten y formen parte de estas manifestaciones culturales. Porque para muestra un botón y mas claro botón que las polleras multicolores de nuestras compañeras de las zonas rurales a las que muchos ciudadanos ignorantes les muestran su desprecio o hacen malas caras sólo por el hecho de aceptarse y vestir sus atuendos tradicionales sin tratar de imitar a nadie, esta actitud es realmente reprobable.
¿Qué estamos haciendo por revalorar nuestras costumbres y tradiciones? La mayoría de gente no hace nada lo deja pasar y sólo ve que cada vez recordamos menos de nuestras tradiciones y copiamos estilos del extranjero en ropa, bailes y música.
La forma de afirmar la identidad cultural es el conocimiento fundamentalmente, y creo que no nos conocemos lo suficiente. Conozcamos más a nuestro pueblo y sus manifestaciones.
Es impresionante lo poco que sabemos los unos de los otros. Lo poco que se conoce, poco o nada sabemos de todo el arte que existe en nuestro pueblo salvo muy raras personas que están inmersas en el hermoso mundo de la cultura, y poco sabemos de la música y manifestaciones de ese tipo.
Hay una labor muy importante, que nos resulten muy familiares las manifestaciones culturales de nuestro pueblo. Es una tarea de imaginación, una tarea de recursos, una tarea poco rentable, entonces no es fácil, pero sí es importante. Es hora de hacer caso primero a todo el arte que tenemos y luego veamos hacia fuera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario